Los realities cazatalentos forman parte de una cadena de ensamblado que fabrica estrellas dispuestas a entregarnos cada verano un nuevo hit. Operación Triunfo, el programa musical insigne de Televisión Española, volvió a las pantallas del país ibérico para reencontrarse con un público juvenil cuyas búsquedas musicales han cambiado radicalmente en los últimos 15 años. En un mundo donde las plataformas de streaming están al alcance de la mano y los algoritmos de Spotify nos conducen (en ocasiones por accidente) a artistas de regiones remotas, no ha de sorprendernos que OT nos haya legado artistas tan disímiles como David Bisbal, por un lado, y Amaia (ganadora del teleshow en 2017) por el otro extremo.
De Amaia Romero Arbizu no hace falta aportar mucha información, pues casi toda su carrera artística se encuentra al salto de un clic. El dato que quizá deba llamarnos la atención, es su admiración confesa por los argentinos El mató a un policía motorizado. Una tarde, mientras se encontraba en el living de la casa de Operación Triunfo, las cámaras del programa la tomaron (al mejor estilo de Gran Hermano) contándole a sus colegas que su hermano le había enseñado una banda argentina que "tiene canciones con letras que parece que las ha escrito un niño. Es tan puro y tan mágico. Se llama El mató a un policía motorizado”. Habrá sido esta identificación tan emotiva lo que la haya llevado a aliarse con Santiago Motorizado, líder de la banda platense, para producir su más reciente sencillo: El Relámpago.
La impronta del sonido titánico de El mató es evidente en esta producción. Los primeros segundos del tema nos reciben con un conjunto de acordes oníricos de piano, el instrumento por excelencia de Amaia, mientras la letra va describiendo una situación propia del (des)amor en los tiempos de Instagram ("te miro las fotos / pero no le doy al corazón", similar al "he subido quince stories, / ¿no lo ves?" de J Balvin junto a Rosalía en Brillo). Las visuales del videoclip que acompaña a este sencillo ilustran la tensión entre lo místico y lo millenial: Amaia se enfrenta en un mismo nivel al ímpetu de un caballo blanco, como a la acción cotidiana de stalkear cada cierto tiempo el perfil de algún ex. Para cuando el jardín empieza a arder y la tormenta se desata, quizás por el efecto del relámpago, la banda soporte imprime una furia que nos hace pensar, en ocasiones, que estamos frente a un track de La Síntesis O'Konor.
El lanzamiento en plataformas digitales de El Relámpago ha abierto las aguas de la crítica musical en Europa y América, dejando de un lado a quienes esperaban un producto televisivo más de la industria del pop ibérico y del otro a quienes nos sorprende gratamente el rumbo musical que está emprendiendo la artista navarra. Vale la pena seguirle los pasos a Amaia, sobre todo sabiendo que cuenta con coequiperos que merecen el respeto de este blogger, como Raül Refree (productor de artistas tales como Sílvia Pérez Cruz y Rosalía) y la catalana Núria Graham. Por lo pronto, tendremos que esperar hasta septiembre para el lanzamiento de su primer álbum.